Con la entrada en septiembre retornamos a la rutina, llega la vuelta al trabajo y el verano se termina. Los días se hacen más cortos y son menos las horas de luz de las que disponemos. Por ello, es importante saber cómo aprovechar al máximo la luz solar para ahorrar en la factura de la luz.
Sea cual sea el tipo de ventana de cada estancia, la mejor solución es utilizar protección solar de interior. Este tipo de protección, como los productos Verosol, permite la entrada de luz y tener vistas al exterior a la vez que se ahorra energía.
Ya sean cortinas plisadas o estores enrollables, las ventajas técnicas son las mismas gracias a la metalización del tejido. Esta, aplicada de manera pionera en los tejidos Verosol, aumenta el rendimiento, consiguiendo una reflexión solar de hasta el 82% y permitiendo pasar la luz pero no el calor.
Esto es muy importante porque de esta forma se aprovecha la luz solar en septiembre, cuando las temperaturas aún son altas y en muchos edificios el aire acondicionado sigue funcionando. Si se evita la entrada de calor, también se prescinde del uso de aparatos de aire acondicionado, ahorrando así energía y dinero.
Por otro lado, las cortinas están disponibles en diferentes configuraciones, como el innovador sistema Twin, que combina dos estores de diferentes aperturas en un mismo sistema. Con esto, es posible adaptar cada cortina a las necesidades del usuario mientras se aprovecha la luz natural, se ahorra energía y se obtiene privacidad.