El próximo viernes, 5 de junio, se celebra el Día Mundial del Medio Ambiente. Este día en 2020 está marcado por el coronavirus, que ha provocado un replanteamiento en la forma de vivir, consumir y de utilizar los recursos que tienen carácter finito y repercuten directamente en el devenir del planeta.
De hecho, precisamente en el Día de la Tierra que se celebraba el 22 de abril en pleno confinamiento mundial, se ponía de relieve cómo habían bajado las emisiones a la atmósfera, especialmente en las grandes ciudades, con la falta de la actividad normal y en muchos soportes se ha visto cómo también la propia naturaleza se adueñaba de espacios aprovechando la ausencia del hombre.
Para esta cita con el medio ambiente, la ONU quiere poner el foco en la importancia de la naturaleza, la biodiversidad y la apuesta que se debe hacer para cuidarla y poder continuar cultivando alimentos, bebiendo agua o, incluso, respirando.
La organización ha elaborado una serie de materiales para concienciar de que ha llegado #LaHoraDeLaNaturaleza, con guías, tests y curiosidades sobre cómo la COVID 19 impacta también sobre la biodiversidad.
Desde Verosol asumimos que #LaHoraDeLaNaturaleza no sólo está en los paisajes con fauna y flora sino que esos paisajes se diseñan también desde el comportamiento en las ciudades, las oficinas, las casas y, en general, en la relación diaria que se instaura en los distintos escenarios en los que transcurre la vida.
Así, la continuidad de la vida tal y como se ha concebido hasta ahora en términos de ecosistemas también depende de si encendemos, más o menos, el aire acondicionado o la luz eléctrica.
Porque todo suma y desde Verosol insistimos en nuestro compromiso con el entorno, trabajando para crear siempre tejidos más eficientes, innovando en los procesos y las técnicas para seguir fomentando espacios más sostenibles y saludables.